 [Escucha este texto]- Las primeras comunidades humanas que habitaron estas tierras datan del Paleolítico y pueden ser observadas a través de los restos materiales hallados en sus asentamientos en cuevas y al aire libre, como en el caso de los materiales procedentes de las terrazas de La Temerosa y La Coca, ambas situadas en los márgenes del Vinalopó y correspondientes al periodo conocido como Musteriense.
- Del Neolítico los hallazgos arqueológicos nos evidencian el asentamiento de las primeras comunidades agrícolas y ganaderas en el valle de Novelda hacia el V milenio a. C. Concretamente en la partida de Ledua, situada en la margen izquierda del río Vinalopó, asentamiento en llanura que nos ha proporcionado como objeto más significativo una vasija con decoración incisa e impresa.
- En el transcurso del III milenio a. C., lo más característico de la cultura Eneolítica son los enterramientos localizados en cuevas, realizados de forma colectiva y acompañados de ajuares funerarios, formados por cerámicas, hachas pulimentadas, punzones de hueso, puntas de flecha y láminas de silex, como muestran los materiales encontrados en las cuevas de la Serreta Llarga y cuevas de La Mola.
- En la Edad del Bronce el paso hacia las sociedades metalúrgicas tránsito entre del III al II milenio a. C., conocido culturalmente como Campaniforme de Transición, esta también, documentado en esta área del Vinalopó, en el yacimiento del Tabaia (Aspe). En este momento el hombre establece su lugar de hábitat en zonas de pie de monte y en altura, factor éste que será característico de la Edad del Bronce, que se desarrolla durante todo el II milenio a.C. Sus actividades se centraban en el desarrollo de la agricultura (cereales y legumbres) y la metalurgia del bronce. Los asentamientos adscritos a esta cultura se localizan en el Tabaia y la Horna (Aspe), el Puntal del Bartolo, Montagut, el Zambo en Novelda. De estos yacimientos proceden un conjunto importante de materiales como, cerámicas hechas a mano, con gran variedad de formas, dientes de hoz, puñales y puntas de flecha de bronce.
- De la Cultura Ibérica, la población indígena asentada en el área del litoral Mediterráneo, recibe la influencia de los pueblos del Mediterráneo Oriental como fenicios, griegos y cartagineses a través de su contacto comercial, influenciando decisivamente en la formación de la Cultura Ibérica que se desarrolla entre los siglos VI-I a.C. Constituyendo una sociedad plenamente jerarquizada, detectada a través de sus ajuares funerarios.
- Sus poblados se localizan tanto en cerros elevados como en zonas llanas con un elaborado sistema urbanístico. En el valle de Novelda el poblameniento ibérico se ha localizado en la zona del Campet, en las terrazas formadas por el río Vinalopó. De la necrópolis de La Regalissia proceden los ricos ajuares funerarios que se exponen en el Museo, como falcatas de hierro, terracotas, fíbulas de bronce, vasos cerámicos griegos, etc. No faltando los ajuares de cerámica doméstica con decoración pintado con motivos geométricos, vegetales y zoomorfos.
- En el tránsito entre los siglos II- I a. C., se desarrolla la romanización de los valle del Vinalopó, a través de las villas rústicas, cuya población se dedicaba a la explotación de las tierras de cultivo. El museo expone un conjunto representativo de terra sigillata, monedas, cerámica común, pesas de telar, entre otras piezas.
- La llegada de los musulmanes a la Península Ibérica favorece el asentamiento de nuevas comunidades rurales en el valle medio del Vinalopó entre los siglos IX-XII Localizándose asentamientos en altura como el Zambo, donde se han localizado cerámicas y objetos metálicos muy significativos.
- En pleno desarrollo del Califato Omeya siglos X-XI, se documenta la existencia de población dispersa con la ocupación del valle de Novelda y del cerro de la Mola como punto de visión estratégica.
- La presencia de los Almohades en el siglo XII, provoca la construcción de un sistema de fortalezas dominando las vías de comunicación. A este periodo corresponde la construcción del Castillo de La Mola. Las excavaciones realizadas en el interior del recinto, han proporcionado cerámicas de diversos tipos, junto a objetos de vidrio y adornos de bronce.
- Conquistada por los castellanos, entre los años 1243 y 1252 Novelda formó parte del Reino de Murcia.
- En 1252 quedaba integrada entre los términos de la municipalidad de Alicante.
- La conquista cristiana del Castillo de La Mola y del valle de Novelda a mediados del siglo XIII, deja su impronta en los ajuares domésticos utilizados por la población aquí asentada como muestra las cerámicas expuestas como escudillas de loza dorada, ollas vidriadas o jarritas pintadas en manganeso, correspondientes a los siglos XIV-XVI.
- A finales del siglo XIII, en 1296, se incorporaba al Reino de Valencia.
- El año 1366, Pedro el Ceremonioso, rey de Aragón, cedía el señorío a Mateo Gornay.
- En 1393, su hijo, Juan I, y la esposa de éste, Violante, nombraron a Pedro Maça de Liçana señor del lugar y del castillo.
- Esta casa constituyó, el año 1448, la baronía de Novelda.
- Con posterioridad fue propiedad, sucesivamente, de los Rocamora, de los duques de Mandás, de los marqueses de Terranova, condes de la Granja y marqueses de la Romana.
- Durante los siglos XV y XVI, la fortaleza parece definitivamente abandonada, no así la población que siguió prosperando, de tal forma que en el año 1510 contaba con 230 familias que, en 1595, habían pasado a ser 2.115 habitantes, de los que la mayoría eran moriscos.
- La expulsión de 1609 representó para la ciudad una grave crisis demográfica y económica de la que no saldría hasta entrado el siglo XVIII.
- En 1611 le fue concedida carta de poblamiento.
- Durante la Guerra de Sucesión tomó partido a favor del archiduque Carlos.
- El 5 de Enero de 1713 nace el sabio y marino Jorge Juan y Santacilia.
- En 1901 se le concedía el título de ciudad.
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