- Torija estuvo rodeada totalmente por una muralla que contaba con tres puertas de acceso a la villa.
- Con el paso del tiempo los diferentes muros han ido desapareciendo ocultos tras las viviendas o destrozados en las diferentes reestructuraciones urbanísticas sufridas por el municipio.
- En las proximidades del castillo aún se mantienen algunos restos de las murallas dignos de ser visitados.
- Tal es el caso de la Barbacana, convertida en mirador ideal hacia el valle que conduce a la capital y que en tiempos fuera lugar de justas y torneos medievales de gran fama en toda Castilla, como el conocido Paso Honroso que celebró Carlos I en honor del apresado rey francés, Francisco I.
- Sólo quedan algunos vestigios.