Se encuentran en el interior de la cueva de un antiguo aprisco de ganado (Aprisco de la Llana).
La cueva está orientada al Sureste.
Sus dimensiones son: 13 m de anchura, 12 m de profundidad y 9 m de altura.
El fondo de la oquedad está dividido en dos ábsides de los que sólo el de la izquierda contiene un grupo de pinturas situado a 1’10 m del suelo.
En la parte inferior se observa una figura muy mal conservada, de apariencia antropomorfa y de color rojo carmín. La recubre una pátina caliza.
Sobre ella, siguiendo de forma paralela los pequeños resaltes estalactíticos de la pared, se encuentra una serie de trazos alargados, mal conservados y de color rojo rosáceo.
En la pared norte de la cueva tiene una canalización tallada en la roca.
Descubrimos otros dos nuevos grupos con restos de pinturas, uno de ellos se trata de una figura imprecisa.