Donde vivió Luis Aceituno, el santo Luisico, un pastor a quien a muy temprana edad sus vecinos le atribuyeron poderes curativos y el boca a boca se encargó de propagar su fama.
Su fama fue tan grande que en los carnavales de los pueblos se cantaba esta rima: «Dejaos de boticas, que saben tanto / mejor os curará Luisico el santo».
Esta es una de las paradas de la `Ruta de los milagros`.
Luisico murió en 1912.
Hoy el cortijo está convertido en un Santuario al Santo Luisico.
En frente del cortijo está la encina con las piedras donde se sentaba el santero en sus meditaciones.